Si estás buscando un cambio en la decoración de tu hogar, el color de las paredes es un elemento clave. Sin embargo, elegir el tono adecuado no es una tarea fácil, ya que hay varios factores a considerar, como el tamaño, la luminosidad y el uso de la habitación, además del resto de la decoración. Para ayudarte en esta tarea, Fustart te brinda algunos consejos que puedes seguir.
El primer paso es elegir un color base neutral para las paredes. Esta superficie es la más dominante en una habitación, por lo que es importante que sea un color claro que facilite la combinación con otros colores. Además, el color base debe estar en armonía con el resto de la decoración, el uso de la habitación y la luminosidad. Por ejemplo, para una habitación con poca luz, un color cálido es apropiado, mientras que, para un lugar muy soleado, un tono frío es adecuado.
El segundo paso es elegir el segundo color predominante. Este color será el que acompañe al color base y se utilizará en textiles como cortinas, alfombras y tapicerías. Puedes optar por un esquema de colores armoniosos con tonos de una misma gama cromática o por colores complementarios que aporten contraste. Por ejemplo, el verde y el rojo son complementarios, así como el azul y el naranja, o el violeta y el amarillo.
Por último, es importante elegir los detalles mediadores que acompañarán al color base y al segundo color predominantemente. Estos tonos suaves darán interés y riqueza visual al conjunto. Con estos consejos, podrás elegir el color adecuado para cada habitación y lograr una decoración fresca y renovada.